Tú decides con quién pasas tus momentos, con quién compartes tú vida y con quién te relacionas.
Cuando pasas tiempo con otras personas que te aprecian, tu autoestima aumenta. Te hacen sentir valios@ y te hacen reparar en tus valores.
Cuando las personas que te rodean solo saben que mostrarte lo que debes de mejorar y lo mal que haces las cosas, tu inseguridad aumenta, te sientes desubicad@ y pierdes el sentido de tus valores y de tu poder.
Está bien reconocer tus debilidades para así poder transformarlas en fortalezas, pero no debes permitir que estas se conviertan en argumentos que te descalifiquen o te hagan sentir insuficiente.
La crítica constante es también un maltrato.
Cuídate, protégete, y sobre todo ámate.
Namaste.
Jordi
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