EL YIN Y EL YANG

El Yin y el Yang conforman el TAO, o lo que para nosotros equivale al Universo.

Estas dos fuerzas simbolizan el principio de la dualidad, presente en todos los elementos de la naturaleza y que hoy por hoy govierna nuestros principios y dicta nuestras leyes.

La ansiada armonía proviene del equilibrio de estas dos fuerzas que se oponen y se complementan.

Equilibrio no implica equidad, sino armonía energética.

Podemos tener mayor cantidad de fuerza yin o yang, pero la tendencia equilibrará el desajuste mediante características que compensen la carencia.

Para la cultura oriental, el yin es la fuerza que representa la oscuridad, la pasividad, la quietud; y por otro lado, el yang representa la claridad (luminosidad), la actividad y el movimiento.

El yin se relaciona con lo femenino, y el yang con lo masculino.

En nuestro sistema, la Luna se relaciona con el yin y el Sol, con el yang.

En nuestra naturaleza, a cada fuerza le corresponde otra opuesta que la complementa.

Cuando estos principios básicos se aplican al arte del Feng Shui, se dice que la armonía en un hogar o en un ambiente de trabajo es la resultante del equilibrio perfecto de todas las fuerzas de la naturaleza.

Para que se logre el equilibrio es necesario que ambas fuerzas habiten el hogar, pues así como el exceso de una fuerza rompe la armonía, también lo hace su ausencia.Los elementos yin son tan importantes como los elementos yang y viceversa.

Tal como el Chi propicia la vida, la buena salud, la felicidad, la prosperidad y la fortuna, el Sha no puede estar ausente en una casa y lo que debe hacerse para que no sea dañino es reencauzarlo, es decir, hacer que circule hacia afuera y pueda en el exterior equilibrarse con las restantes fuerzas.

La armonía y el equilibrio son características intrínsecas de la naturaleza y si algo rompe esa armonía y ese equilibrio, normalmente se relaciona con la acción ignorante del ser humano.

Cuando en una casa se rompen esos principios naturales se pierde el equilibrio y surgen los problemas que se intentan solucionar aplicando las reglas y las técnicas del Feng Shui:-el arte de saber elegir el lugar óptimo, el momento adecuado, la alimentación justa y un alineamiento con la energía Universal. Todo ello conlleva el uso adecuado de los objetos, con el fin de generar armonía, respeto, exaltación de la mística del espíritu y paz-.