El camino de la rectitud siempre es el camino más duro, pues en el no habrá complacencia ni espejismos que encadenen al ego ni consideraciones que justifiquen nuestros apegos.
En la vida lo realmente importante no son tus logros materiales, sino lo que hayas logrado inspirar a los demás, el amor que hayas sabido compartir y las sonrisas que hayas sabido regalar.
El ego y sus aliados: orgullo, vanidad, complacencia, egoísmo, rigidez y falta de compasión no pueden compartir ninguno de sus atributos con quien quiera vivir desde el amor incondicional.
Namaste.
Jordi
No hay comentarios.:
Publicar un comentario