Utiliza la fuerza del viento para llegar a tu destino.
No intentes capearlo, pues al hacerlo te convertirás en una veleta que cambiará de rumbo sin criterio ni objetivo, simplemente por comodidad, por miedo o por costumbre.
Sigue siempre a tu corazón y utiliza las experiencias como herramientas de crecimiento, como lecciones de vida o como mensajes del destino.
Nada hay de negativo en tu vida, solo tu mente puede engañar tu visión y ensordecer el mensaje de tu corazón.
"Que tu vida esté inspirada siempre por la pasión, guiada por el corazón y contrastada por la razón".
Namaste.
Jordi
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